En primer lugar quisiera agradecer los comentarios hechos al artículo de estreno «Empezar la casa por el tejado» aquí en «La Interzona»; mi rinconcito en Trialworld. Tengo que añadir además que acorde al número de visitas y comentarios recibidos directamente o a través de las redes sociales no tengo por menos que sentirme, orgulloso, animado y respaldado en esta tarea.
¡Muchas gracias a todos!
Explicaros que antes de comenzar la serie de artículos decidí no hacer comentarios posteriores al mismo ni contestar a los que tuvierais algo que decir. Con ello solamente quiero dejar la puerta abierta para que todos se sientan invitados a participar libremente con sus intervenciones sin la «amenaza» de que yo pueda entrar a rebatir ninguna opinión contraria cuando estas lleguen; que llegarán seguro debido a los temas que guardo en el tintero. No lo haré.
En estos artículos de opinión, los comentarios y las opiniones de todos los trialeros son bienvenidas, precisamente de eso se trata; de despertar la crítica y las conciencias con el objetivo final de crear debate y mejorar nuestro deporte si eso es posible; y yo creo que lo es; sobre todo a nivel del piloto de base y del deportista por afición.
De hecho creo que hay un larguísimo camino por delante si queremos que el trial en España se acerque de lejos a lo que fue en sus años dorados de los 70 (irónicamente los años de nuestra libertad) y porque no; a lo que podría ser si se dieran las condiciones necesarias; que no son tantas y de las que iremos hablando poco a poco durante esta temporada que tenemos por delante. [LEER MÁS]
Os dejo con mi segunda entrega; espero que despierte algunas conciencias y os prometo que la tercera entrega será muy positiva o por lo menos diferente.
Para terminar la introducción; agradecer a Sandra Gómez que haya permitido personalizar mi artículo con su nombre. ¡Muchas gracias campeona!
EL SECRETO DE SANDRA GÓMEZ
Para quien no la conozca, Sandra Gómez es una joven de Cercedilla muy deportista. Una que va en moto. Sobre todo y por ahora en moto de trial, aunque sus ojos azules comienzan a mirar en otras direcciones. Que el mundo es muy grande y que tiene infinitas posibilidades es algo que Sandra está descubriendo desde hace poco tiempo.
Sandra compagina sus estudios en la universidad con el deporte, actividad a la que ha dedicado casi toda su vida. Esquí, gimnasio, footing, bicicleta, escalada, moto, moto, moto y más moto. Disfruta de la moto y para recordárselo a quien lo haya olvidado; Sandra hasta hace muy poco era subcampeona de España de trial, tercer clasificada del campeonato del mundo individual, campeona del mundo por equipos y ganadora de un First Class Award en los Scottish Pre65 compitiendo frente a 180 hombres hechos, derechos y empecinados en ganar para sí uno de esos codiciados trofeos Escoceses. Nadie la ha regalado nada.
No está nada mal este palmarés en un solo año, para sí lo quisieran todas las trialeras del mundo menos una. En cualquier sitio civilizado, desarrollado y en donde se estima a aquellos que consiguen títulos para su país, el palmarés de Sandra sería suficiente para no tener que preocuparse demasiado por su futuro deportivo inmediato.
Conozco a Sandra Gómez y sé de primera mano acerca de sus circunstancias, su entorno, sus metas y aspiraciones; aunque ella no lo sepa conozco sus limitaciones también; deportivas por supuesto; y sé de primera mano todo el esfuerzo y sacrificio que ha supuesto que Sandra tenga el envidiable palmarés que tiene. Ella tampoco lo sabe; pero conozco los secretos de su éxito… secretos de un éxito que sospecho es el mismo secreto que esconde el trial femenino español en su totalidad.
He corrido tres veces mano a mano con Sandra los Scottish pre65, he entrenado con ella algunas veces y la he ayudado a conseguir una de sus metas; participar en los Scottish Six Days Trial entrando por la puerta grande y sobre todo con garantías de acabar la durísima carrera escocesa y hacerlo con la cabeza bien alta.
No se me olvidará su estado de nervios cuando la llevamos a la casa de John Moffat en Fort William después de los Pre65, donde conviviría con la familia durante esos seis días de mayo. Ella todavía no era consciente de la cantidad de gente que iba a velar por que sus seis días fueran viento en popa; buena gente como David, Andrew, Jean, Sandy, Alan, John… habían comprometido su palabra y tendrían un ojo puesto en Sandra constantemente. ¡Pero mucho cuidado! Que nadie la reste meritos, ya que la buena preparación física y el altísimo nivel de trial necesarios para afrontar unos SSDT son algo que Sandra traía en su maleta al aterrizar en Escocia.
En los tres años que hemos compartido los pre65 lo que más me ha llamado la atención de Sandra es su espíritu ganador. No la vale con quedar bien, Sandra quiere ganar y además podría hacerlo, atesora todo lo necesario que un campeón necesita para llegar a serlo; aunque todavía no tiene dentro a ese director de orquesta interior que la ayude a que todos los instrumentos físicos y mentales funcionen armónicamente para conseguirlo. Ese director de orquesta no es tan sencillo de obtener ya que muy pocas personas lo llevan d
entro de forma natural y muchas menos personas son capaces de instruirte para despertar al campeón interior.
Ojalá en 2014 lo consigas Sandra. Pero sobre todo ojalá podamos repetir los pre65 si tú nueva agenda te lo permite y así poder darte la revancha… ¿decías que nunca podría pasar verdad? Pues pasó; todo es posible cómo puedes comprobar.
En la primera entrada de mi blog; «Empezar la casa por el tejado» he querido demostrar como la política de promocionar un deporte a base de conquistar títulos mundiales puede ser equivocada. En el caso del motociclismo femenino y más concretamente del trial femenino español, esta política se demuestra todavía más equivocada si cabe mientras alguien no me demuestre lo contrario.
Vuelvo a explicarme.
Nuestras chicas del trial han sido las mejores del mundo en 2012; de cuatro posibles medallas conquistaron tres; Campeona del mundo con Laia Sainz; tercer clasificada Sandra Gómez y campeonas del mundo por equipos (Laia, Sandra y Mireia).
¡Enhorabuena chicas, que orgullosos estamos todos los trialeros de vosotras!
Si, sé que estos son datos del año pasado, pero no son muy diferentes a los de este año 2013 y sirven para confrontar la realidad del trial femenino español a la realidad de las cifras globales del deporte femenino publicadas por el CSD referente al año pasado; 2012.
Pero vayamos directamente a las estadísticas del CSD referidas al deporte femenino. De 65 deportes federados femeninos en España; el motociclismo ocupa la posición 62 por número de licencias; antepenúltima posición; con un total de unas escasas 197 federadas incluyendo todas las especialidades de las dos ruedas como velocidad, moto cross, enduro, quads, trial…
Ciento noventa y siete federadas en motociclismo (197), superando solamente al billar (20), motonáutica (46) y boxeo (80) por debajo de deportes como el esquí náutico (233), fútbol americano (288), halterofilia (375) o el kickboxing (459); y a años luz de otros deportes enormemente minoritarios como son la lucha (1.101), colombicultura (2.235), galgos (2.344), el tiro olímpico (4.710) o la petanca (4.974), por poner algún ejemplo.
Si ya sé que es increíble; pero por cada mujer española que hace motociclismo federado hay 12 españolas que crían y adiestran palomas de competición y compiten con ellas; otras 12 que cazan con galgos en competiciones federadas; 24 que practican el tiro olímpico y 25 que compiten en petanca; quién lo diría.
Siendo la media de mujeres federadas en el deporte español del 20%, en el motociclismo es de un ridículo 1,3%.
¿Pero en realidad cuántas chicas hacen trial federado en España? ¿Treinta quizás? Yo creo que incluso treinta es un número generoso. Pongamos treinta. Con esta cifra la media de mujeres en el trial federado se situaría en un paupérrimo 0,03% aunque con un resultado final espectacular ya que de cada diez federadas tenemos una de las ansiadas medallas mundiales con las que la RFME y el CSD justifican el trabajo y la promoción que se hace de nuestro deporte.
Un éxito rotundo e inapelable si la meta son los títulos, pero si la meta es la promoción del deporte y la libre participación como bien cultural, el éxito se convierte en un estrepitoso, rotundo y vergonzoso fracaso.
¿Cómo es posible que en un deporte con una participación femenina tan pobre como es el trial en España salga gente de talla internacional como Sandra?
Como he dicho antes yo conozco cual es el secreto de Sandra. Por supuesto parte de él son el duro esfuerzo en la preparación física y el entrenamiento, sin los que ningún deportista podría competir. Aunque eso lo sabe todo el mundo.
Su verdadero y escondido secreto, aquel que los federativos y políticos del CSD no conocen o no quieren reconocer; un secreto seguramente compartido con las muy pocas chicas del motociclismo español en general y del trial en particular; un secreto que tiene nombre propio, de hecho muchos nombres propios; los de sus entornos personales. Los nombres de aquellos que se esfuerzan y las ayudan para que consigan sus metas; los nombres de aquellos que suplen las carencias de las ayudas y la promoción del trial en España; en el caso de Sandra nombres como Mariano, María Luisa, Beltrán… y tantos otros que ella conoce mejor que nadie.
No estaría mal que todos los conociéramos para poderles dar las gracias también a ellos por vuestros éxitos.
Javier Cruz
